La Nueva Méndez es el resultado de 30 años de trabajo, nace con los fundamentos de una pastelería de tradición, hoy con nueva cara, pero manteniendo lo que forjó un negocio familiar que vio la luz en 1991. Ese fue el sueño de Laura Méndez y su madre, quienes volcaron el amor por la cocina en recetas con el espíritu «hecho en casa”; sabores protagonistas en muchas mesas de clientes que por décadas han sido fieles a la pastelería.

En un momento en el que estamos sometidos a enfrentar cambios -por la pandemia y transformaciones socioculturales- nace La Nueva Méndez, manteniendo la tradición de la cocina de origen con sus recetas, respetando una producción con calor de hogar, pero abriendo el abanico a productos que hoy se hacen necesarios: sin gluten, sin lactosa, sin azúcar, más otros que sorprenderán, porque llega una pastelería sofisticada, a la medida, para eventos y ocasiones especiales, en el número que el festejo lo requiera.

Laura Méndez se queda en cada receta que identificó su negocio, los pastelitos chilenos, sus premiadas empanadas de pino, las tortas de merengue, y se continuará el legado: «para hacer pasteles se rompen huevos», porque si bien La Nueva Méndez es una versión renovada que se acomoda a estos tiempos, la intención y los cimientos de esta nueva empresa se soportará siempre en los sabores y el espíritu de una pastelería con 30 años de tradición, que cierra un capítulo para continuar haciendo historia.